domingo, 25 de noviembre de 2012

De un día para otro, algo ha cambiado, ya no eres la misma, sientes que puedes caminar sin tener suelo bajo tus pies y que puedes respirar sin que haya oxígeno. Todo tu mundo se vuelve extraño y todo porque has probado el dulce sabor de sus labios. Solo con rozarlos has sentido una magia que nunca habías sentido, esa magia que te hace volver a creer en un futuro, que te hace olvidar todo tu pasado y que te hace volver a ser feliz.